Consejos para ahorrar energía en días de confinamiento

 
Con la situación actual que estamos viviendo en la que debemos permanecer más tiempo en casa del habitual una de nuestras nuevas preocupaciones es la próxima factura de la luz. Una de las tareas más difíciles es ahorrar energía teniendo en cuenta que estamos necesitando muchas más horas de luz en el hogar que en nuestra vida habitual, ¿verdad? Hoy os queremos facilitar unas pautas para evitar el desperdicio energético e implementar medidas eficientes en el día a día.
 
En anteriores post de nuestro blog hemos recomendado en alguna ocasión, consejos para elegir electrodomésticos más eficientes, sustituir las bombillas convencionales por bombillas por LED o cómo mejorar el aislamiento térmico en ventanas. Bien, si ya tienes estas medidas adoptadas, tendrás mejores opciones respecto a la factura de la luz y posiblemente no notes tanto el incremento con respecto a facturas anteriores.
Mientras tanto, puedes poner en práctica unos simples consejos como los siguientes, son hábitos sencillos y muy fáciles de poner en práctica en toda la familia.
 
Utiliza el calor del horno para otras elaboraciones. Son días de creatividad e ideas en el hogar, cocinar es una de las principales opciones entre las familias. Aprovecha cuando cocines en el horno para diversificar el calor y realizar varias cocciones. La comida para mediodía y un bizcocho, sería una forma muy eficiente de evitar desperdiciar el calor creado en la primera cocción. Si calentamos una pizza también podemos aprovechar el calor residual para hornear pan, galletas o cualquier de postre casero que necesite horno.
 
Apaga la base de enchufes por la noche. Es un hábito que muy pocas personas ejecutan, y muy sencillo. Durante la noche, se puede ahorrar energía si se apaga la conocida ‘regleta’ donde enchufamos diferentes cables, cargadores, así como electrodomésticos que no necesiten estar en funcionamiento necesariamente.
 
Evita dejar en ‘standby’ el televisor. Durante la noche, puede evitar un gran gasto de electricidad apagar la televisión del todo. Este consumo se denomina ‘consumo vampiro’ ya que piensas que está apagado, pero no del todo. ¡Revísalo antes de dormir!
Evita abrir la nevera constantemente. Está demostrado que cada vez que abrimos y cerramos la nevera se incrementa el consumo de energía debido a la necesidad de recuperar el frio perdido durante la apertura. Es recomendable planificar antes de abrirla qué cosas vamos a necesitar e intentar hacerlo todo a la vez. Igulmente, cuando venimos de la compra y necesitamos introducir todos los alimentos perecedores que necesitan frio, es mejor dejarlos todos juntos fuera de la nevera y cuando estén todos clasificados, abrir una sola vez el frigorífico e introducirlos.
Agua fría en lugar de caliente. Aunque todavía no estamos en época de poder ducharnos con agua fría, si que es recomendable no abusar del agua caliente, tanto si tenemos un calentador eléctrico como uno de butano o gas. En la medida de lo posible, podemos evitar el agua caliente; para fregar platos, limpiar, fregar suelos o incluso para aquellas personas con pelo largo, pueden lavarlo de forma independiente al cuerpo con agua fría, así la sensación térmica es menor.
Continúa con el horario habitual de uso de grandes electrodomésticos. Si en tu tarifa de la luz habitual tienes un calendario establecido para reducir el gasto, continúa con él en la medida de lo posible. La organización es esencial y pautar las horas donde realizamos tareas en la vivienda también. Aprovecha para continuar la misma rutina que días atrás y podrás notar la diferencia en la próxima factura.
Lee y practica ejercicio en espacios con luz natural. Es una de las mejores formas de reducir el encendido de bombillas innecesariamente. Busca la mejor hora para activar tu cuerpo y tu mente y aprovecha la luz natural en una de las ventanas con mejor iluminación, ¡te sentirás mejor, garantizado!
Con gestos muy simples, podrás notar la diferencia en el siguiente recibo de luz. No cuesta nada concienciarse en el consumo diario y evitar dejar luces encendidas. Es una tarea fácil que si desarrollas durante estos días, podrás cambiar tus hábitos y recudir costes en tu vivienda también en el futuro.